Volvemos a nuestra pasión por el Diy (do-it-yourself). Ese mueble deteriorado que nos pide a gritos una vida nueva es fácil de «resucitar» con un par de sencillos pasos, un poco de voluntad y por supuesto una buena pintura.

En este caso tratamos sobre madera así que antes de nada es imprescindible lijar a conciencia la madera para dejar el material perfectamente preparado. Además si la madera está muy castigada y estropeada no le vendrá mal previamente la aplicación de una pintura selladora que actúe como imprimación.  Nosotros aquí vamos a elegir un esmalte en varios tonos para conseguir ese juego de colores tan chic. Por un lado, tonos azules; uno más claro y otro más oscuro y luego blanco. Como siempre tú eres el artista así que puedes elegir la combinación que más te guste y vaya con tu decoración y el espacio donde el mueble va a estar instalado. Recuerda que puedes emplear diseños con colores lisos o bien buscar un elemento que te guste, dibujarlo y recortar siluetas. También puedes comprar «plantillas para estarcir» o para decorar en tiendas de decoración, bricolaje o ferretería.

Recuerda que esta idea es aplicable a muebles, lámparas, sillas… La pintura nos puede ayudar a «customizar» los elementos y darles un toque personal y único.